SANKALPA : YOGA.

Sankalpa es un concepto del yoga al cual, posiblemente, no se le da la importancia que requiere o que merece.

El yoga es una disciplina que busca alcanzar la armonía entre el cuerpo, la mente y el espíritu de la persona que lo practica.

El Sankalpa es una de las herramientas más poderosas que tenemos a nuestra disposición para lograr este propósito.

Ante esto, debemos saber que el Sankalpa es un elemento integral de la práctica de yoga, el cual nos va a permitir que mente y cuerpo trabajen juntos para conseguir un propósito específico.

En este artículo vamos a ver qué es Sankalpa, su definición, cómo elegir un Sankalpa y practicarlo en nuestro día a día, los beneficios que nos ofrece, y algunos ejemplos sobre este concepto tan importante en yoga.

¿Qué es Sankalpa? Definición

Sankalpa es un término que en sánscrito quiere decir propósito o resolución.

Aplicado al yoga, Sankalpa se refiere a la intención consciente que creamos durante la práctica, para ayudarnos a conseguir un objetivo personal.

El Sankalpa es una herramienta de gran poder que nos va a ayudar a enfocar la mente y el cuerpo apuntando hacia una meta específica, algo que se va a traducir en una mayor realización personal.

Por lo general, debemos establecer el Sankalpa al inicio de nuestra práctica de yoga, donde se suele crear un estado de relajación profunda.

Es durante este estado cuando es adecuado establecer intenciones claras y positivas para la práctica, como, por ejemplo:

  • Enfocar la mente en el momento presente.
  • Mejorar la capacidad de concentración.

Un detalle muy importante es que el Sankalpa también se puede utilizar para superar hábitos negativos y promover cambios positivos en nuestra vida.

Por ejemplo, supongamos que padecemos de ansiedad y queremos superar esta situación.

Para ello, podemos establecer un Sankalpa que sea algo similar a Soy una persona tranquila y estoy en paz.

El hecho de repetir de manera constante este Sankalpa puede ayudar a programar la mente y enfocarla en pensamientos positivos, lo que a su vez nos puede llevar a superar obstáculos y alcanzar metas.

Matizar que el Sankalpa no consiste en fijarse en un objetivo superficial o materialista, sino que es una intención profunda relacionada con los valores y propósitos a nivel personal.

Cómo utilizar Sankalpa en yoga

Utilizar el Sankalpa en yoga va ser importante, ya que ello nos va a ayudar a focalizarnos en aquello que queremos alcanzar mediante la práctica de esta disciplina.

Lo primero debemos encontrar es un momento de tranquilidad para nosotros mismos o mismas. Como ya hemos dicho, esto puede ser adecuado hacerlo al comienzo de una práctica de yoga, durante la relajación profunda.

Durante este periodo de relajación podemos comenzar a establecer una intención clara y positiva para orientar nuestra práctica de yoga a través del Sankalpa.

Algo importante es que esta intención resuene con nosotros a nivel emocional y espiritual, para que con ello pueda generar el efecto buscado.

Cuando ya hemos establecido nuestra intención a través del Sankalpa, podemos repetirlo mentalmente o en voz alta durante nuestra práctica.

De esta forma, al establecer una intención clara y positiva, podemos enfocar la mente y el cuerpo hacia un objetivo específico, lo nos puede llevar a una mayor realización personal, algo que buscamos con la práctica de yoga.

Decir que además de practicar el Sankalpa durante la práctica de yoga, también podemos repetirlo durante las meditaciones y en nuestro día a día.

El hecho de repetir constantemente un Sankalpa hará que podamos programar nuestra mente para enfocarnos en pensamientos positivos y constructivos.

Beneficios del Sankalpa en la práctica de yoga

Introducir el Sankalpa en la práctica de yoga nos va a ofrecer algunos beneficios importantes que van a incidir en nuestra mente y cuerpo.

Cuando marcamos una intención clara y positiva a través del Sankalpa, podemos enfocar nuestra mente y energía hacia un objetivo específico, lo que nos puede llevar a una mayor realización personal.

Podemos decir que los beneficios van a ser los siguientes:

  • El establecimiento de un Sankalpa ayuda a enfocar la mente hacia un objetivo específico, lo que puede ayudar a reducir la distracción y la ansiedad.
  • Un Sankalpa puede ayudar a que nos mantengamos motivados durante la práctica de yoga, ya que nos da un propósito claro y significativo.
  • La repetición constante de un Sankalpa positivo puede ayudar a aumentar nuestra autoestima y la confianza en nosotros mismos o mismas.
  • Al establecer un Sankalpa y enfocarnos en conseguirlo, podemos desarrollar nuestra fuerza de voluntad y disciplina.
  • El Sankalpa puede ayudarnos a superar los obstáculos en la práctica de yoga y en nuestro día a día, ya que nos da un objetivo claro para trabajar y nos motiva a seguir adelante.
  • La práctica del Sankalpa puede ayudarnos a reducir el estrés y la ansiedad, ya que nos enfocamos en pensamientos positivos y constructivos.

MEDITACION VIPASSANA.

¿Qué es la meditación Vipassana?

La meditación Vipassana es un tipo de meditación budista (si bien de orígenes hindues) originario de la India, que la tradición considera fue redescubierta por el Buda Gautama tras siglos pérdida. Se trata de una de las formas de meditación más antiguas conocidas, y se basa en la purificación y transformación personal a través de la auto-observación. De hecho, Vipassana significa, aproximadamente, ver las cosas claramente o tal y como son.

Estamos ante un tipo de meditación que se basa en la potenciación de la concentración y la atención sobre el propio ser, centrándose en primer lugar en la respiración para posteriormente profundizar en las sensaciones del cuerpo y la mente. Es necesario tener en cuenta que esta meditación, aunque tiene efectos relajantes sobre quien la practica, no se centra en adormecer el organismo sino en facilitar la conexión entre el cuerpo y los procesos mentales.

La meditación Vipassana se ha ido expandiendo al resto del mundo, existiendo diversos centros y retiros que la enseñan de manera gratuita. Como el poso de la religión sigue estando muy presente en muchos de ellos, generalmente en estos centros suele requerirse un periodo previo de diez días sin matar, robar, tener relaciones sexuales y consumir sustancias psicoactivas, y durante el tiempo que dura el curso el sujeto no debe hablar, leer ni escribir, ni comunicarse. Se pide que el individuo esté completamente centrado en sí mismo

¿Cómo se practica?

Una vez visto lo que es, es relevante saber cómo se práctica. Para empezar, la persona se sienta en el suelo, en principio con las piernas cruzadas y la espalda recta (si bien la postura concreta puede variar o incluso es posible sentarse en una silla si tenemos problemas de salud que lo requieran). No es imprescindible cerrar los ojos, aunque facilita el proceso.

Tras ello se debe empezar a intentar alcanzar un estado de calma, a través de la respiración. Debemos centrarnos en seguir el flujo de aire al inhalar y exhalar y las sensaciones que genera, intentando no detenerse en otros elementos que puedan distraer. No se trata de forzar la respiración sino de centrarse en observar cómo se produce. Este proceso es conocido como anapana, y tiene como principal objetivo agudizar la conciencia y calmar nuestra mente.

Una vez hecho esto, poco a poco vamos a ir notando las sensaciones, percepciones, pensamientos y emociones que nos rodean, siendo importante no centrarse y trabajar en ellos sino simplemente observando cómo surgen y pasan. Este aspecto es el que se denomina per se meditación Vipassana, en la cual vamos a ir recorriendo desde la cabeza hasta los pies todo nuestro cuerpo para ir observando las diferentes sensaciones de cada parte.

La concentración se enfoca en cada región corporal, sin operar en ella. No hay juicio, ni siquiera etiquetación ni reflexión, solo observación. Se trata de ser testigo de lo que pasa por nuestra mente y cuerpo sin interferir en ello. Este aspecto es mucho más fácil de decir que de hacer. Si dejamos de observar para pasar a la acción en alguno de los elementos, es recomendable volver a la respiración.

Tras el cuerpo viene la mente: podemos ir observando nuestros pensamientos y emociones, sin juzgarlos, únicamente dejándolos fluir. También nos podemos enfocar en lo que nos rodea, sintiendo las diferentes sensaciones como la temperatura, la luz, los olores o el tacto. En diferentes cursos que enseñan esta técnica, añaden también parte de meditación metta, en la que el sujeto que medita primero cultiva el amor hacia sí mismo para luego expandirlo hacia los demás.

Ventajas y beneficios

La práctica de la meditación Vipassana genera diferentes beneficios para quien la lleva a cabo. No en balde, se trata de un tipo de meditación que existe desde hace casi tres milenios.

A nivel mental, quienes la practican mencionan sentir un potenciación de su capacidad de observación y un mayor nivel de paz mental y relajación. También mejora estados de ansiedad al permitir observar la situaciones con más calma, y facilita una mejoría en el estado de ánimo. Por otro lado, contribuye a que nos nos identifiquemos y le demos una tonalidad menos exagerada a la importancia de nuestros pensamientos.

La meditación Vipassana se encuentra asociada también a la disminución de la presión arterial, al rebajar estados de ansiedad. Disminuye la tasa cardíaca y nos ayuda a tener un mejor control de las vías respiratorias. Reduce la importancia que le damos al dolor, tanto físico como mental, y contribuye a conocernos mejor a nosotros mismos, lo que nos motiva y nos hiere, a comprender mejor y aceptar nuestras emociones negativas.

Vipassana y mindfulness

La meditación Vipassana puede parecer algo exótico y extraño para parte de la población, pero lo cierto es que se trata de una forma de meditar que ha generado diferentes técnicas muy populares a día de hoy. Estamos, de hecho, ante el tipo de meditación en la que se basa una técnica hoy en día tan conocida como el mindfulness.

Esta técnica, al igual que la meditación Vipassana, se basa en la atención consciente a nuestro cuerpo y al momento presente evitando la actuación automática. La focalización en el aquí y ahora que permite esta técnica permite ser mucho más consciente de nuestro ser, y ha manifestado ser de utilidad tanto a nivel general como en sujetos con diferentes problemáticas tales como ansiedad, depresión, trastornos por dolor, estrés postraumático y trastornos obsesivos.

KARMA YOGA.

Ya todos sabemos que hay distintos tipos de yoga y que esta disciplina milenaria tiene opciones para todos los gustos y necesidades. El instructor de yoga Mariano Lencina, estudioso de la disciplina y sus bondades, nos cuenta qué es el Karma Yoga, cómo se practica y cuáles son sus beneficios. Sumergite en el mundo de la ampliación de conciencia en favor de un buen vivir.

Según los seguidores de esta práctica, el Karma Yoga es el proceso de volverse consciente y sensible a las energías que ponemos en movimiento. Tiene que ver con la entrega desinteresada, la empatía y la responsabilidad personal en el proceso de buscar y promover el bienestar.

Qué es el Karma Yoga

Mariano nos dice que todas las sendas del Yoga nos llevan, por recorridos diferentes aunque complementarios, a un estado de salud física, paz mental y armonía espiritual. Una de las opciones para disfrutar los beneficios de esta práctica y este estilo de vida es el Karma Yoga.

Entre las sendas más conocidas, especialmente entre los occidentales, está el Hatha Yoga, que podemos traducir como yoga físico. A través de las asanas (posturas), bandas (llaves energéticas), pranayamas (ejercicios respiratorios), mudras (gestos), shatkarmas (purificación interna del cuerpo) o de los ejercicios de relajación, el hata yoga nos conduce a un estado de equilibrio físico y armonía.

Nos permite controlar el cuerpo, movilizar nuestras energíasy absorber el prana. En ese estado la meditación surge como una consecuencia natural

Las demás sendas o formas principales corresponden a los aspectos predominantes de la personalidad humana, y  todas aparecen explicadas en el Bhagavad-Gita.

La finalidad del Karma Yoga es encontrar la armonía en la acción y por ello, es un camino de yoga accesible para todo el mundo, ya que en esta vida todos hemos de actuar de una forma u otra.

El término Karma significa acción. La ley del karma es la ley de causa y efecto, acción y reacción. El Karma Yoga es el yoga de la acción lúcida, una actitud ante la vida que se caracteriza por el espíritu de servicio, de entrega y el des-apego.

El Karma yoga nos enseña a enfocarnos en todo aquello que nos beneficia a nosotros mismos y a otros. Es hacer el bien y evitar el daño sin ninguna expectativa de recompensa, sin esperar agradecimiento ni reconocimiento. Solo por el beneficio de hacer algo que estamos felices de hacer

Cuáles son las 4 ramas del yoga

Si bien los distintos caminos del yoga se han ampliado y diversificado, en general se habla de 4 tipos principales de Yoga:

  • Karma Yoga. El sendero de la acción.
  • Bhakti Yoga. El sendero de la devoción.
  • Gñana o Jnana Yoga. El sendero del conocimiento o de la sabiduría.
  • Raja Yoga. El sendero del control físico y mental.

Karma Yoga: el Yoga de la acción consciente

En esta senda, las acciones cotidianas se convierten en el medio para lograr sosiego, armonía, bienestar, un estado de gracia y conexión. Nos enseña a actuar sin implicarnos en la acción ni obsesionarnos por los resultados. También nos muestra como conducirnos sin estar bajo el dominio de nuestro ego ni intentar manipular a los demás.

Para practicarlo es importante trabajar la estabilidad, la imparcialidad, la capacidad de mantenernos firmes, estables en nuestro centro a pesar de los vaivenes de la vida. Es así como aprendemos a controlar nuestras reacciones viscerales( rabia, odio, celos, deseos de venganza), a no actuar a partir de ellas, generando así más malestar, a convertirnos en nuestros propios observadores y dejar de ser esclavizados por el ego.

En lugar de ello, comenzamos a dar lo mejor de nosotros mismos, a entregarnos por completo en cada acción. Abrimos el corazón y empezamos a fluir con la vida.

Cómo llevar a la práctica el Karma Yoga

  • Haz lo que puedas. Cualquier cosa que hagas, intenta hacerla lo mejor que sepas. Si se te ocurre una forma mejor, aplícala.
  • Actúa por un deseo genuino de bondad y de excelencia. Implícate en la acción, pero desapégate de los resultados. No utilices las circunstancias como medio para conseguir un fin; menos aún si es a costa de los demás.
  • Recuerda que cada trabajo y circunstancia es una oportunidad para avanzar, para aprender algo. Nos permite desarrollar nuestras cualidades, aprender cosas sobre nosotros mismos, dar algo a los demás.

Olvida el pasado y el futuro. Cuando se te pide dar lo mejor de ti, se trata de hacerlo en el único instante que existe: AHORA.

  • Trata a los demás como te gustaría que te traten. Recuerda que cada ser humano es único pero todos compartimos nuestras emociones y sentimientos humanos. Cuando interactúes hazlo desde el amor.
  • Piensa que la acción no implica agitación y movimiento constante. Podemos actuar desde el sosiego.
  • Cultiva el desapego y la serenidad. Sin dejarte llevar por halagos o insultos, por la vanidad o el orgullo.

Muchos se preguntan cómo llevar el karma yoga a tu día a día y el punto de partida es sencillo: está a mano de todo. Se trata de vivir más atentamente, con más amor y con una mayor valoración y aprecio a la vida cotidiana para crear más felicidad en nuestras vidas y en la de los que nos rodean.

Para quiénes está recomendado

Para personas o períodos de la vida en los que predomina la vitalidad, la necesidad de actuar y expresarnos, para aquellos de naturaleza extrovertida.

8 DHARMAS MUNDANOS.

Los 8 dharmas mundanos hacen referencia a esos bloqueos, preocupaciones o apegos que nublan nuestra conciencia y capacidad para ser felices. Así, el budismo al igual que la propia psicología nos recuerdan que el hecho vivir aferrados a determinadas dimensiones, como el orgullo, los bienes materiales o el deseo de ganancia, nos empuja a una existencia de carencias y sufrimientos.

A menudo, suele decirse aquello de que el budismo es una casa llena de hermosos tesoros. Sin embargo, desde nuestra visión marcadamente occidental es común que en ocasiones, no sepamos distinguir o apreciar la belleza de esas riquezas que se aglutinan en dicho marco filosófico y espiritual.

Los principios del budismo y la práctica del Dharma no son fáciles de llevar a cabo, y la razón de ello está en nuestra mentalidad, en el tipo de cultura en la que nos desenvolvemos a diario y que de algún modo, termina moldeándonos.

“Dharma es la disciplina de vivir la verdad; no es conocer o leer la verdad, no es comentarla ni discutirla, no es su lógica, no es su razonamiento”.

-Yogi Bhajan-

De ahí, que sean muchos los expertos en dichas corrientes que nos recomienden un sencillo consejo. No importa si no sabemos nada sobre el tema de los chakras, sobre la meditación o la supuesta energía vital contenida en el yoga kundalini. Esas prácticas que muchos manejan casi sin saber no tienen relevancia si primero no se conocen los 8 dharmas mundanos.

Porque sumergirnos, delimitar y trabajar en ese conjunto de preocupaciones comunes, es sin duda el primer paso para nuestro despertar espiritual. Es el umbral del budismo, es poder desprendernos de nuestros pensamientos obsesivos y deseos sociales para dejar atrás nuestro eterno temor a la pérdida. Nuestra fijación en la ganancia, en el apego sin sentido…

Los 8 dharmas mundanos

Los 8 dharmas mundanos nos hablan sobre todo de dos conceptos: el desapego y la falta de permanencia. Esas ideas, esos conceptos, son sin duda nuestra auténtica némesis, esa sombra que nos persigue y que nunca terminamos de ver o de reconocer. Así, dentro de nuestra mentalidad y comportamiento somos muchos los que orientamos nuestra existencia en relación a ciertas dimensiones, necesidades, personas y materiales a los que consideramos esenciales para sentirnos bien.

Vivimos apegados a todas esas dimensiones sin comprender, sin intuir que nada en este mundo puede retenerse para siempre. En nuestra cotidianidad, habitan las certezas, los apegos y las expectativas porque todo ello nos confiere una sensación de control. Y si hay algo que nos agrada, es tenerlo todo bajo control. Sin embargo, no hay nada tan volátil, caprichoso e inmanente que la propia vida.

De ahí que cualquier cambio nos desestabilice. Que toda variación, expectativa fallida o meta incumplida nos conduzca al sufrimiento y al estrés. Para el Dharma, mientras nuestra mente siga contaminada por esos ocho principios mundanos jamás seremos libres ni nobles. Por tanto, veamos a qué dimensiones se refiere este marco del budismo.

Primer par: el apego a las posesiones materiales/ aversión a no recibirlas o verse separado de ellas

Los 8 dharmas mundanos se establecen en 4 pares de apego y aversión. Así, el primero de ellos hace referencia a algo que nos será muy familiar. Hablamos, cómo no, de nuestra necesidad por poseer y el temor que nace de pensar en la distancia o el daño sobre eso que entendemos como nuestro. Mil ejemplos lo ilustran: nuestro apego a la tecnología, a determinadas marcas de ropa, de zapatos, a nuestros coches, etc.

Queda claro que muchas de esas cosas las consideramos esenciales para nuestro día a día: nos sirven para trabajar y para dar una determinada imagen. No obstante, el problema está en experimentar un claro sufrimiento cuando no tenemos acceso a esos objetos, cuando nos faltan y percibimos nuestra dependencia absoluta hacia ellos. Este es sin duda un dharma mundano muy relevante en el que trabajar.

Segundo par: el apego al reconocimiento, la aprobación y la fama/ aversión a la censura o la desaprobación

Todos, de algún modo, necesitamos sentirnos validados, reconocidos y aprobados por quienes nos rodean. Somos seres sociales y esos lazos de seguridad nos permiten desenvolvernos con mayor soltura. Ahora bien, el problema como siempre llega cuando esa necesidad se vuelve prioritaria y constante. Cuando somos incapaces de vivir sin ese refuerzo externo, sin esa alabanza, sin ese permiso, sin ese like en nuestras fotos, sin esa aprobación por parte de nuestras familias, parejas o compañeros de trabajo.

No saber o no poder vivir sin esos refuerzos o experimentar bloqueos o ansiedad cuando nos censuran o desaprueban es otra fuente absoluta de sufrimiento. Otro de los pilares de los 8 dharmas mundanos que estamos obligados a identificar y a cambiar.

Tercer par: el apego a una buena reputación/ la aversión a una mala imagen

¿Qué implica el hecho de vivir condicionados por tener una buena o mala reputación? Implica básicamente no ser libres, no poder actuar, sentir, vivir y desenvolvernos de acuerdo a nuestros deseos. Porque quien está pendiente de lo que piensen los demás o de lo que puedan concluir otros al respecto de nuestra apariencia, actos o palabras, veta por completo el propio crecimiento personal. No es lo adecuado.

“Cuando haces aquello que te gusta, con pasión, sin recibir retribución alguna y pierdes la noción del tiempo…
Cuando lo haces por el simple hecho de que eres feliz haciéndolo y además estás sirviendo a los demás, es cuando estás en Dharma”.

-Yogi Bhajan-

Cuarto par: el apego a los placeres de los cinco sentidos/la aversión a experiencias desagradables

Puede que este par de los 8 dharmas mundanos nos origine cierta contradicción. ¿Qué hay de malo si orientamos nuestra existencia a esos cinco sentidos con los que saborear la vida en todas sus formas, sabores y sensaciones? Aún más… ¿por qué no sentir aversión de lo que es desagradable o incómodo?

Para entenderlo debemos ponernos en el contexto del budismo. En esa visión donde lo frugal, lo humilde y lo justo nutren cada conducta, no caben los excesos. En esta filosofía no armonizan las pasiones elevadas, la gula, el deseo, la necesidad… En el equilibrio está la mesura y el bienestar, y es en ese punto de no necesidad hacia nada, es donde la conciencia se libera de lo material, donde aparece la sabiduría, la compasión y el auténtico progreso espiritual.

“El agua no puede acumularse en la cumbre de una montaña,

y el verda­dero mérito no se acumula sobre la cresta del orgullo”.

Para concluir, es muy posible que estos 8 dharmas mundanos nos parezcan algo complicados de delimitar y transformar. Esto es así porque dentro de nuestra concepción nos es muy difícil renunciar a la fantasía de permanencia, abrazar la idea de que no tenemos el control absoluto de todo lo que sucede.

No obstante, quedémonos con la esencia de estos enfoques, dejemos que nos inspiren para dar forma a una vida más autónoma, libre de egoísmos, orgullos huecos, necesidades vacías y pensamientos que no nos permiten crecer como personas.

TIPS PARA INICIARTE EN EL YOGA.

Busca en tu interior la necesidad de sentirte bien.

Busca opciones que te permitan iniciarte de una forma cómoda y segura.

Ten en cuenta el punto de partida , la edad , la condición física para buscar lo adecuado.

Si prefieres probarlo en clases en linea , busca las clases para iniciados.

Recuerda que lo importante es el camino. ! Disfrútalo! No hay prisa.

Recuerda que no hay competición , se trata de tu avance individual , repite las clases las veces que necesites para lograr el objetivo que es , en definitiva , tu propia mejora , tu flexibilidad , tu bienestar.

Aprende a valorar el esfuerzo , el avance , la conciencia , la presencia y el disfrute.

Equilibrio . Balance.

NAMASTE:

YOGA DE LA RISA.

El Yoga De La Risa: Reír Como Filosofía De Vida

LA RISA ES GRATIS. SI QUIERES REÍRTE A CARCAJADAS, REDUCIR EL ESTRÉS Y DESCONECTAR DE TODO, DESCUBRE QUÉ ES LA RISOTERAPIA O TERAPIA DE LA RISA Y CÓMO PRACTICARLA

Como bien dice Carla Magnani, terapeuta de Artiem Audax, “La felicidad está en lo cotidiano, y algo tan espontáneo como es la risa puede ser la mejor medicina”.

El yoga de la risa puede ser el mejor antídoto para todos aquellos que quieran probar algo nuevo y totalmente vinculado con la felicidad. Se puede decir que es un tipo de yoga reciente muy similar a la risoterapia, ya que el objetivo es curar haciendo uso de la risa, la respiración y la meditación, junto con determinados ejercicios muy divertidos.

Todo el mundo puede practicarlo, sea de la edad que sea y practique yoga o no:

Reírse está al alcance todos. Solo es cuestión de querer hacerlo.

¿Qué Significa Yoga De La Risa?

El término yoga de la risa viene del concepto en sánscrito hasya yoga, un método fundado en 1995 por el doctor indio Madan Kataria. Consiste en reírse sin un motivo concreto, gracias al uso de técnicas y ejercicios específicos para divertirse.

Se ha comprobado en numerosos experimentos que la risa tiene infinidad de beneficios para nuestro organismo, ya sea real o provocada, ya que nuestro cuerpo no es capaz de distinguir entre una u otra.

Concretamente, Katarian destaca varios aspectos que caracterizan muy bien este tipo de yoga:

  • Engloba técnicas específicas para provocar la risa.
  • Existen muchos tipos de risas, gente con más o menos humor… Pero en casi todas las clases, el hecho de ver a todas las personas riendo hace que la risa se contagie de unos a otros.
  • Se ha comprobado que los efectos de la risa previenen enfermedades como el cáncer o el sida.
  • Al contrario que en otros estilos de yoga, empezarás a notar los beneficios desde el día 1.

Ejercicios Del Yoga De La Risa: Cómo Se Practica

El yoga de la risa se basa en hacer diferentes ejercicios de respiración o pranayamas, junto con una meditación. La risa es un recurso más del cuerpo, que cualquiera puede utilizar. La práctica de estos ejercicios hace que puedas estar riéndote durante 15 o 20 minutos sin parar.

“No nos reímos porque somos felices, somos felices porque nos reímos” – Doctor Madan Kataria.

Normalmente se trabaja en grupo, de forma libre y sin complejos; simplemente dejándonos fluir y sacando lo mejor de nosotros mismos. Al principio, la risa puede ser algo forzada, pero según avanza la práctica, ya sea por el contacto visual con los demás o la energía que se respira, empieza a contagiarse de unos a otros.

Para practicar el yoga de la risa en casa, en pareja, en familia o con amigos puedes poner en práctica lo siguiente:

  1. Abre la boca y saca la lengua, poniendo las manos en las orejas, como si fueras un anima, y ríete desde el estómago.
  2. Da una palmada con cada respiración, sincronizando el movimiento. Igualmente, puedes reírte mientras aplaudes o actuar como si estuvieras loco, dando saltos mientras aplaudes, y siguiéndole los demás.
  3. Haz juegos infantiles.
  4. Canta canciones solo con una vocal.
  5. Pídele a los compañeros que os miréis unos a otros y os señaléis riéndoos unos de los otros a carcajadas, intentando reírte más fuerte que el otro.
  6. Ríete de cualquier cosa; acompaña con un “jajaja” todas las frases: “me llamo Pedro, jajajaja”, “voy a decir hola, hola! jajajaja”).

Beneficios Del Yoga De La Risa

El 70% de las enfermedades en el mundo (presión arterial alta, ansiedad, depresión, cefaleas, insomnio, asma, enfermedades estomacales, cáncer…) están relacionadas con el estrés.

La serotonina, hormonas que se generan al reír, se ha demostrado que elimina los efectos del estrés, pues alivia y reduce la producción de adrenalina y cortisol (hormonas que se generan a causa del estrés). Igualmente, tiene propiedades antidepresivas, mejora la oxigenación del cerebro y disminuye la tensión acumulada.

Otros beneficios que tiene el yoga de la risa son:

Mayor energía y menor tensión muscular

La risa hace que entre mucha más cantidad de oxígeno y, por tanto, circule mejor la sangre, mejorando así el sistema circulatorio en general y reduciendo la presión arterial. Es por eso que es muy beneficioso para enfermedades cardiovasculares, así como para llenarse de energía o mejorar la concentración.

Suaviza las emociones negativas

Cuando reímos, liberamos endorfinas, las cuales influyen de manera directa en el funcionamiento del cerebro y en el sistema inmunológico. Estas actúan como analgésicos, reduciendo el malestar y los niveles de estrés.

Como decía al principio, la risa es gratis y contagiosa. Es la mejor medicina para desconectar y ver la vida con más optimismo. Empieza a ganar en calidad de vida poniendo en práctica un recurso tan sencillo y sanador como es reír.

Déjate Llevar, Fluye Y Ríe

RESPIRACION DE FUEGO.

La respiración de fuego es una técnica beneficiosa para el organismo, pero debe hacerse con precaución y bajo supervisión. ¡Sus consecuencias favorables te van a sorprender!

El pranayama es la técnica de respiración que se utiliza en el yoga, y se compone de varios ejercicios que complementan a las asanas —posturas— de cada modalidad yóguica. La respiración de fuego es uno de esos pranayamas, y tiene múltiples beneficios para el organismo.

Uno de los factores más importantes dentro del yoga es la respiración, porque permite que el yogui se relaje al inhalar y exhalar profundamente mientras realiza los asanas. Esto ayuda a calmar la mente, libera tensiones y oxigena el cerebro, como afirma un estudio publicado en el Annals of the New York Academy of Sciences.

¿Qué es la respiración de fuego?

El nombre sánscrito de la respiración de fuego es kapalabhati; el término kapala se traduce como ‘cráneo’ y bhati como ‘limpiar’. Por lo tanto, se hace referencia a la limpieza de la mente.

Como detallaremos más adelante, este ejercicio ayuda a controlar la ansiedad y a disminuir los efectos de los nervios, la preocupación, la tristeza, el dolor y el miedo.

La postura más común para hacer este pranayama es la del loto, es decir, sentada con los pies flexionados y cruzados, la espalda recta y las manos sobre las rodillas.

¿Cómo se hace?

El kapalabhati consiste en inspirar suave —si eres principiante— y de forma profunda a través de la nariz hasta llenar los pulmones, y espirar con fuerza para expulsar todo el aire.

La espiración también se hace con la nariz, y se debe contraer el abdomen hacia la columna, con la finalidad de estimular el diafragma. El ritmo de las respiraciones aumenta conforme el alumno vaya dominando la técnica.

¿Cuáles son los beneficios de la respiración de fuego?

Practicar la respiración de fuego tiene múltiples beneficios relacionados con la emocionalidad y el funcionamiento del organismo. A continuación, vamos a detallar algunos de ellos.

1. Recupera el control en situaciones de estrés

Al respirar de manera controlada, aumenta la concentración y la mente se limpia de las energías negativas que causan el estrés y la ansiedad. La relación entre el ritmo de la respiración y la ansiedad fue confirmada por una investigación publicada por Respiration and Emotion.

Cuando estamos estresados, el diafragma se contrae hacia adentro, justo hacia el área del plexo solar, que es donde se «guardan» todas las emociones según la tradición hindú.

Con la respiración de fuego, las emociones podrán fluir y salir del cuerpo, si es necesario, para equilibrar el organismo y mejorar la salud mental y física.

2. Purifica la sangre y los pulmones

Este ejercicio de respiración contribuye en mejorar la circulación y purificar la sangre, debido a la cantidad de oxígeno que se inhala. Las ventajas de estas inhalaciones y exhalaciones profundas y completas son confirmadas por varios estudios citados por el International Journal of Yoga.

Las teorías yóguicas sostienen que, al expulsar todo el aire, no quedan residuos de este dentro del sistema. De este modo, se posibilita la llegada de aire nuevo y más limpio a los pulmones cuando se inhala de nuevo.

3. Incrementa la capacidad pulmonar

Los seres humanos no solemos utilizar los pulmones a su máxima capacidad porque por lo general respiramos de manera limitada. Esto quiere decir que hacemos respiraciones cortas que no llenan de aire a los pulmones.

Si se practica la respiración de fuego con frecuencia, los pulmones se acostumbrarán a almacenar de forma progresiva una mayor cantidad de aire. Una investigación publicada en 2005 por Respiratory Physiology & Neurobiology afirma que el yoga mejora las funciones respiratorias en ciertas personas, aunque esto no se da en la totalidad de los practicantes.

4. Fortalece el chakra del ombligo

Este chakra, también llamado Manipura y que es el tercero de acuerdo a la cultura hindú, es el encargado de concentrar las emociones. Es el chakra más grande y potente de todos; está relacionado con las acciones y emociones.

¿Alguna vez has sentido un «vacío en el estómago» cuando estás asustado o triste? De acuerdo con las creencias yóguicas, esto puede deberse a la manifestación de este chakra en tu cuerpo.

5. Ayuda a la memoria y concentración

Al respirar profundo no solo la sangre se oxigena: el cerebro también lo hace. El yoga y sus técnicas de respiración mejoran las capacidades cognitivas y la concentración, tal y como ratifica la American Psychological Association.

6. Estimula el funcionamiento del aparato digestivo

Mientras se realiza el ejercicio de respiración el aparato digestivo se activa debido al movimiento del diafragma.

De esta forma, con la práctica del yoga se obtienen mejores en la digestión y se alivian malestares como el síndrome de intestino irritable, según un estudio publicado por Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine.

PRANAYAMA.

El pranayama: la magia de la respiración consciente

La palabra Pranayama se compone en sánscrito de las palabras prana: “respiración” y yama: “control” y por lo tanto, Pranayama significa literalmente “control de la respiración”.

Se trata de uno de los 8 pasos esenciales descritos por Patanjali –yamas, niyamas, asana, pranayama, pratyahara, dharana, dhyana, samadhi– en el libro de los Yoga Sutras, texto básico del yoga con más de 2000 años de antigüedad.

El pranayama recoge todos los ejercicios de respiración yóguica que tienen como objetivo hacer que el prana (la energía vital) fluya en nuestro cuerpo energético.

En yoga hay distintas técnicas de respiración que a través de la exhalación, inhalación y retención del aire, así como del tiempo que mantenemos cada fase, nos ayudan a relajar, estimular o equilibrar la energía. El prana, energía vital, pasa a través de los nadis, ayudando a que la energía fluya a través de ellos desbloqueándolos y limpiándolos con el flujo de la respiración, para así poder disponer de un cuerpo y una mente sana y saludable.

Es importante iniciarse en la práctica de pranayama acompañados de un profesor/a.

La importancia de la respiración en el yoga

Como te comentaba, Pranayama contempla todos los ejercicios de respiración yóguica, que tienen como objetivo final que el prana (energía vital) fluya en nuestro cuerpo energético. Por lo tanto, la respiración es nuestro alimento esencial que nutre nuestro cuerpo y mente y nos vitaliza. De ahí, la importancia en toda práctica de yoga de usar una respiración consciente y el uso de técnicas yóguicas de pranayama para ayudar a limpiar nuestros canales energéticos o nadis para que el prana fluya libremente por nuestro organismo. De este modo, limpiamos y equilibramos nuestros chakras y poseemos una mayor fuerza vital, armonía y bienestar.

El pranayama consta de las siguientes fases:

  1. PURAKA: inspiración
  2. RECHAKA: espiración
  3. ANTAR KUMBHAKA: retención
  4. BAHIR KUMBHAKA: retención sin aire en los pulmones.

En la realización de pranayama hay que tener muy presente el papel de “Kumbhaka”, ya que durante la retención de aire las energías se equilibran dando lugar a un aumento del prana, lo que induce a la mente a entrar en un estado de conciencia más profundo. Además, sobre la retención se produce un efecto activador sobre la kundalini, la energía que tenemos en “letargo” en la base de la columna y que al despertarla debe ascender hasta el último chakra (Sahasrara o chakra de la corona) donde se producirá el Samadhi, un estado de supraconsciènica e iluminación que nos lleva a la unión con la energía del universo.

Tomar conciencia de la respiración y sus fases es fundamental en la práctica de yoga. En el hatha yoga nos permite pasar de una asana a otra y en secuencias como el saludo al sol que repetimos con frecuencia en clase, puedes ir observando cómo fluctuas con ella. Cuál es su calidad, ritmo, fluidez y si puedes irla adaptando a cada asana. Para los alumnos principiantes, al inicio suele ser complicado tomar esta conciencia de la respiración porque solemos estar muy atentos a las indicaciones de las asanas, pero es fundamental ir aplicándola e integrándola para poder ir sintiendo los beneficios de cada asana.

Beneficios del pranayama

La respiración nos permite regular tanto la energía del cuerpo como nuestro sistema nervioso y las fluctuaciones de nuestra mente y emociones. Todo está unido y la respiración sirve de vehículo para generar equilibrio entre cuerpo y mente. Por ello, el pranayama aporta grandes beneficios tanto para nuestro cuerpo, mente como espíritu:

  • Ayuda a nuestra salud física y mental.
  • Purifica las vías respiratorias y pulmones.
  • Favorece la circulación sanguínea y purifica la sangre.
  • Asegura la apropiada circulación de los fluidos corporales beneficiando el proceso digestivo.
  • Previene enfermedades.
  • Otorga vitalidad.
  • Disuelve bloqueos energéticos.
  • Estimula la memoria, la concentración y el rendimiento intelectual.
  • Otorga calma y serenidad.

Tipos de pranayama

Según sus efectos y beneficios los podemos clasificar del siguiente modo:

  • PURIFICANTES: Douti, Anunasika, Nadi Shodana
  • ESTIMULANTES: Kapalabhati, Bastrika, Ujjayi
  • REFRESCANTES: Shitali
  • REGENERATIVOS: Surya bheda, Kumbaka, Samavritti

Para realizar algunos de estos tipos de pranayama deberemos utilizar Nasagra mudra o mudra de la nariz, el cual permite regular la respiración a través de las dos fosas nasales. Este mudra se puede realizar de la siguiente manera:

Coloca la mano derecha delante de la cara y deja las yemas de los dedos índice y corazón apoyadas en el entrecejo. El pulgar queda al lado de la fosa nasal derecha para poder taparla y el anular junto a la fosa nasal izquierda. El dedo meñique queda junto al anular. Con el dedo anular taparemos, cuando sea necesario, la fosa nasal izquierda. Así cuando realicemos el ejercicio de pranayama, taparemos la fosa nasal derecha con el dedo pulgar para poder respirar por la izquierda, y cuando respiremos por la derecha, el dedo anular tapará la fosa izquierda. Durante la retención cerraremos ambas fosas con los dedos pulgar y anular.

BENEFICIOS DEL YOGA.

  1. Calma espiritual. La calma espiritual es esencial para todo ser humano, es lograr tener esa paz contigo mismo, y mantenerte en tranquilidad.
  2. Descanso del alma. El tener descanso en el alma no es más que conseguir esa tranquilidad y felicidad con nosotros mismos.
  3. Conexión e integración. Uno de los beneficios más relevantes del yoga es la conexión entre tu mente y tu cuerpo. …
  4. Libertad espiritual. La libertad espiritual es un proceso que está en constante desarrollo. …
  5. Conocimiento y sabiduría. Con la práctica de esta actividad hindú se logra conseguir el camino de la sabiduría y conocimiento.

PRANAYAMA.

Pranayama, la arte de la respiración del Yoga


La palabra Pranayama o Pranaiama, es de origen sanscrito, y su significado se traduce como “control de la respiración”. El término es utilizado para designar un conjunto de ejercicios del Yoga, que involucran el sistema respiratorio.

Los maestros de Yoga señalan que realizar técnicas de Pranayama permite establecer no solo el control de la respiración, sino del cuerpo y la mente, logrando el equilibrio a través de la disciplina y la concentración.

Existen distintos ejercicios o tipos de Pranayama, que se ejecutan con propósitos tales como oxigenar el cuerpo; mejorar la circulación sanguínea y la concentración; relajación y alineación de los chakras.

La base de las prácticas Pranayama es aprender a respirar profundamente, esto quiere decir, que el proceso de respiración incluye la contracción (al exhalar) y expansión (al inhalar) del estómago, y no sólo el uso de la parte superior del pecho (pulmones).

Ejercicios Pranayama


En el “Libro Completo de Magia, Hechizos y Ceremonias (2008), la especialista esotérica Migene González Wippler, sostiene que los yoguis recomiendan ejercicios específicos para perfeccionar la respiración o Pranayama, entre los cuales la autora menciona:

Bhasrika

“Este ejercicio es hecho junto con uno de las asanas, usualmente la postura de loto (padmasana), o si no es posible, la postura semiloto.

Lo importante es mantener derecha la espalda. Bhasrika consiste en una serie de diez respiraciones estomacales rápidas como la acción de un fuelle”.

“Deberían hacerse aproximadamente cuarenta respiraciones por minuto en este ejercicio, comenzando por bloques de diez a la vez.

Después que el ejercicio es hecho y ha aumentado la acción del corazón y la circulación de la sangre, se realiza de nuevo, esta vez inhalando a través de la ventana izquierda de la nariz y exhalando a través de la derecha con la misma sucesión rápida anterior.

De nuevo, comenzando este ejercicio deben ser retenidas diez respiraciones. La ventana derecha de la nariz es identificada con la respiración del sol o pingala (principio masculino), y la izquierda se relaciona con la respiración de la luna o Ida (principio femenino)”.

Kapalabhati

“Este ejercicio es similar al anterior, pero se concentra en la parte superior del cuerpo —el pecho, el cuello y la cabeza—.

Esto se logra sentándose derecho en una silla o sobre el piso en la posición de loto. La respiración es un poco más rápida que en el bhasrika, aproximadamente sesenta inhalaciones por minuto.

Los ojos deben estar cerrados durante este ejercicio y la persona debe concentrarse en las áreas del cuello, pecho y cabeza. Esta práctica es muy útil para problemas del pecho o para despejar la mente”.

Cabe destacar que los ejercicios Pranayama deben hacerse con prudencia, dado que si el organismo no está acostumbrado a ellos, puede producirse la hiperventilación del individuo.

Lo correcto es y empezar la práctica (preferiblemente) bajo supervisión experta; adaptar el cuerpo poco a poco a la actividad; y aumentar de forma paulatina la frecuencia y duración de los ejercicios.